Vis a vis es una expresión española procedente del francés vis-à-vis, que significa ‘cara a cara’. Se utiliza en contextos cultos.
Vis a vis es sinónimo de tete-á-tete (también ‘cara a cara’ en francés).
En francés antiguo, el vis significaba ‘cara’, por adaptación del participio latino visum (‘visto’), del verbo videre (‘ver’).
También se denomina vis-à-vis a un mueble, ya bastante fuera de uso, compuesto por dos asientos. Esos asientos en vez de estar dispuestos el uno en frente del otro, como en el carruaje vis-à-vis o bien uno al lado del otro, como sucede en el sofá, las personas se sientan una en una dirección y la otra en dirección opuesta, pero de tal manera que sus rostros quedan a la misma altura y muy cerca, facilitando conversar en la intimidad. El mueble vis-à-vis tiene forma de S. En ambos senos de la S se encuentran loa asientos, de tal modo que las dos personas que en ellos se sientan uno tiene los pies en una dirección y la otra en la dirección contraria. Esos muebles no pueden colocarse adosados a la pared, sino en medio de la habitación. Requieren, como consecuencia habitaciones grandes. Todos los presentes puede percibir que dos personas están haciendo un aparte. Quizá por ello los vis-à-vis van cayendo en desuso y sólo se conservan en casonas señoriales.